París es maravillosa. Recuerdo la primera vez que la pisé. Mi marido y yo éramos novios y fue de nuestros primeros viajes juntos. Fuimos un fin de semana y nos enamoramos de la ciudad (y también un poco más de nosotros). Años más tarde volví por trabajo y hace unos meses, con mi ya marido. Y una vez más volví a comprobar que, como me pasa con Nueva York, cuando vuelves a una ciudad en la que ya has estado, la disfrutas más, de forma diferente. Las primeras veces siempre son un poco estresantes. Quieres verlo todo y no eres capaz de apreciar los detalles, los momentos. Pero luego, cuando ya has visto, te dedicas a vivir la ciudad. Eso es justo lo que hicimos esta vez, vivir París.
Fuimos en un tren de alta velocidad de Renfe - SNCF desde Barcelona. A mí me da miedo volar (aunque lo hago) y los aeropuertos (y todo el proceso desde que sales de casa hasta que subes al avión) me agobian soberanamente. Son algo más de 6 horas de trayecto que se pasan volando. El tren es comodísimo y para alguien como yo, muy bucólico y romántico; porque mientras viajas vas viendo el paisaje del Sur de Francia.
Me resulta muy gracioso cuando escucho a alguien decir la frase: "esta se ha operado la cara" o "esta se ha operado los labios". Y entonces me imagino a los cirujanos con las máquinas de constantes y los bisturís, abriendo en canal las mejillas o la boca de alguien. Y me entra la risa. Sinceramente, creo que en los tiempos que estamos ya, es muy cateto hablar así, ¿no os parece?
La cara no se opera ni los labios tampoco. Ya es hora de dejar a un lado los prejuicios y los tabús que rodean al mundo de la medicina estética. Por eso os quiero hablar de mi experiencia con uno de los tratamientos estéticos del que más se habla (mal habla, en muchas ocasiones): el bótox. Os voy a contar la verdad, porque mi experiencia quiero que sirva para resolver todas las dudas que alguien pueda tener al respecto. Os voy a decir lo que me ha gustado y, también, lo que no.
No alcanzo a entender por qué la gente no lo cuenta, cuando es algo absolutamente normal. Es un tratamiento de belleza, igual que nos ponemos una crema en la cara o una mascarilla en el pelo. Y no compro para nada lo de 'la belleza natural' porque, ¿verdad que nos pintamos las uñas?, ¿verdad que nos teñimos el pelo porque no nos gusta que se nos vean las canas?, ¿verdad que nos maquillamos? No nacemos con las uñas de colores, ni con mechas en el pelo ni con los labios rojos. ¿Por qué lo hacemos entonces? Porque queremos vernos bien. Y porque, afortunadamente, hoy en día tenemos a nuestro alcance esas posibilidades. ¿Que podríamos prescindir de ellas? Claro. Pero, si nos ayuda a vernos mejor, ¿por qué no hacer uso de ellas?
Ya sé que no es lo mismo ir a la peluquería que hacerte un retoque estético, pero lo explico así para que me entendáis. También soy consciente de que hay mucha gente, sobre todo gente a la que vemos en plataformas de expansión masiva como la televisión o las revistas, que han abusado mucho de estas técnicas. Pero vuelvo otra vez a lo de antes, ¿a que cuando veis a una persona hiper mal maquillada os choca y no os gusta? Os diré que, para mí, el secreto de cualquier tratamiento, retoque, intervención... está en dos cosas: 1. Hacerlo en un lugar profesional, de confianza, con expertos que tengan años de trayectoria y experiencia, que te asesoren y que no te hagan nada por hacer, ni por sacarte el dinero. 2. Hacerse lo realmente necesario, lo que necesites y no más. Para mí es la clave.
En mi caso, tenía dos líneas muy marcadas en la frente. Todo el mundo las tiene. Pero yo soy una persona muy expresiva y las tenía muy profundas. Acudí a Clínica Opción Médica, en Barcelona, porque hablé con algunas amigas que habían ido a hacerse algunos tratamientos y me la aconsejaron. Allí, en una primera visita gratuita, me vi con el doctor Miguel Aragón, 30 años trabajando en medicina estética y pionero en la aplicación de diferentes tratamientos en este campo.
Lo que más me gustó fue la sinceridad con la que me habló. Me dijo que yo tenía un rostro muy bonito y que únicamente, si yo quería porque tampoco era algo súper evidente (aunque yo sí que me lo notaba demasiado; esto nos pasa a todos, nadie nos ve nada pero nosotros nos lo vemos todo), me podía minimizar las dos arrugas de la frente con bótox. También os quiero decir que mi intención era hacerme otro retoque estético, a parte del bótox, y el doctor me dijo que no lo hiciera, que él no lo veía y que no lo necesitaba. Eso me dio muchísima confianza, la verdad. De hecho, en la clínica me contaban que perdían pacientes (y obviamente ingresos) pero que preferían que así fuera.
Como os decía, os voy a contar la verdad, mi experiencia. No tiene por qué ser la de todo el mundo. Pero creo que os puede ayudar y sacar de muchas dudas y prejuicios.
Para realizarse un tratamiento de bótox no hay ningún tipo de preparación. Es decir, no tenéis que hacer nada especial antes. De hecho, el proceso es rapidísimo y se realiza en un box, en una camilla. La toxina botulínica se aplica con una aguja finísima, como si fuera una inyección, y la cantidad que se pone depende de tus necesidades. En mi caso ya os digo que era muy poco.
Lo primero que hace el doctor es detectar esas zonas más afectadas y esas arrugas. Las marca y ahí aplica el producto. A mí me puso en estas arrugas que os digo y también un poco en el entrecejo y en las patas de gallo de los ojos. Me puso poco porque, y esto también me gustó, me dijo: "yo prefiero poner poco, que pasen unos días, se asiente todo y luego ver si se necesita más; a poner siempre estamos a tiempo".
¿Duele? No duele; pero sí molesta un poco. Ahora, es totalmente soportable. Notas un picor muy leve que desaparece enseguida. En total fueron unos 20 minutos como mucho. Y luego me fui a trabajar, tan normal. Os diré que durante la tarde tuve un poco de dolor de cabeza, que es normal, y desapareció. También me noté algún bultito en la frente, que también desapareció. No os voy a engañar; la sensación es extraña. Supongo que porque era la primera vez; porque lo que hace el músculo es paralizarse, con lo que no puedes arrugar la frente, no puedes levantar las cejas como antes.
A los 20 días volví a la clínica para que el doctor me viera e hicimos un pequeño repaso. Me dijo que todo estaba perfecto y que todo esto que os digo iría desapareciendo. Y así fue. Otra cosa que os quiero decir es que, la primera vez no, pero en el repaso me salió un hematoma al lado de un ojo. También desapareció. Esto os lo digo porque puede pasar, o no, pero puede pasar. Que lo tengáis en cuenta. No os hagáis este tratamiento si en los siguientes días tenéis una boda, un evento, un viaje, tenéis que haceros fotos... porque existe esa posibilidad. No os asustéis porque es normal.
Entonces, después de todo lo que os he explicado... ¿Me gustó? ¿Me lo haría otra vez? Y la respuesta es que sí. Hay que dejar pasar un poco de tiempo para ver bien los resultados. A día de hoy, tengo movilidad en la frente y las arrugas se ha minimizado. Nadie nota nada y cuando digo que me he puesto un poco de bótox en la frente la respuesta es: "oye pues qué bien te lo han puesto".
Como sé que este tema interesa y mucho, y como yo soy periodista y me gusta hablar de las cosas con propiedad y bien, le hice un montón de preguntas al doctor que aquí a continuación os dejo para que tengáis toda la información posible. Si aún así os queda alguna duda, podéis dejarme un comentario aquí o escribirme en cualquiera de mis redes sociales. Estaré encantada de ayudaros en lo que pueda, aunque lo que más os recomiendo es que, si estáis pensando en este tipo de tratamientos, pidáis una cita en Clinica Opción Médica para que os vean sus doctores, os asesoren y resuelvan todas vuestras inquietudes y desinformaciones que podáis tener. Vais a estar en buenas manos.
Responde el Dr. Miguel Aragón, responsable de la Unidad de Medicina Estética de Clínica Opción Médica y especialista en Medicina Estética Avanzada.
*¿Qué es y para qué sirve el bótox?
La toxina botolínica es el tratamiento ideal para despedirse
de las arrugas de la frente, el entrecejo y las patas de gallo. Una técnica no
quirúrgica muy eficaz que tiene una duración de intervención de tan solo 20 minutos. El bótox es un procedimiento que produce una relajación
temporal de los músculos que originan las arrugas de expresión, consiguiendo un
rejuvenecimiento facial de forma eficaz, delicada y natural.
*¿A qué edad es recomendable aplicarlo?
No hay una edad mínima; a partir de la mayoría de edad,
aunque suele empezar a utilizarse a partir de los 30, dependiendo del estado de
la piel de cada persona.
*¿Es para todas las personas? ¿Las embarazadas pueden ponerse
bótox? ¿Lactantes? ¿Por qué?
Las embarazadas no pueden ponerse bótox, está contraindicado. En cuanto a la lactancia, está clasificado como bastante seguro,
bien administrado es poco probable que afecte a la leche materna. Lo mejor es
comentarlo con el médico especialista antes de realizártelo si estás
amamantando.
*¿Puede provocar reacciones alérgicas? ¿Por qué?
La toxina botulínica
puede tener efectos adversos, más o menos frecuentes, que varían en
función del lugar en el que se aplica y de la persona. El primero y muy improbable
a tener en cuenta es una posible reacción alérgica que puede causar diferentes
síntomas como inflamación de la cara y la garganta, dificultad para respirar,
urticaria, etc. Los efectos secundarios suelen producirse en los primeros
días posteriores a su aplicación y en general duran poco tiempo y no tienen
importancia.
*¿Con qué tipo de características de la persona los
resultados son más notables?
El bótox es notable en todo tipo de personas. Trata las
arrugas de expresión. Evidentemente, si lo aplicamos cuando empiezan a aparecer
es más notable. También es un tratamiento de carácter preventivo.
*¿Cómo se aplica? ¿Por qué se hace un repaso?
Se aplica con pequeñas agujas para que casi sea
imperceptible en su aplicación. Se realiza un repaso para ver que está actuando
como debe de hacerlo y en los músculos que debe. Además, si hay alguna pequeña asimetría, es el momento de corregirla.
*¿Molesta cuando se introduce?
Antes de la realización del tratamiento, aplicamos una
crema anestésica para minimizar las molestias del proceso.
*¿Quita expresividad? ¿Cambia las facciones?
Ésta es una de las principales dudas que se hace un paciente
cuando llega a la clínica interesada en el bótox. Preocupa mucho la falta de
naturalidad y expresividad. Es un tratamiento totalmente seguro y si lo
realizan médicos especialistas el resultado es excelente. La pérdida de
expresividad con el bótox tan solo puede relacionarse con el uso excesivo o la
mala praxis, por ello es fundamental acudir a auténticos profesionales con una
amplia experiencia.
*¿Efectos secundarios?
Los efectos secundarios más comunes, aunque poco frecuentes, son el hinchazón de la zona , los hematomas o dolor de cabeza.
*A mí me dolía la cabeza por la tarde. ¿Es normal?
En algunos casos, el bótox puede provocar cefaleas. No todo
el mundo reacciona del mismo modo ante esta sustancia externa al cuerpo.
*A mí, durante las primeras horas, me salieron algunos bultitos en la frente. ¿Es normal?
Puede pasar. Es el efecto del producto. Si se masajea la
zona desaparecen rápidamente.
*¿Salen hematomas?
Pueden salir hematomas aunque no es lo más habitual.
*¿Por qué puede quedar una ceja más levantada que otra? ¿Qué
se hace si esto pasa? ¿Se puede corregir?
Por la aplicación del producto, puede ser que no actúe
exactamente igual en un lado que en el otro o que el cuerpo no reacciones
igual. Además hay que recordar que no somos totalmente simétricos. Puede
corregirse en el repaso que suele realizarse a las dos semanas.
*¿Qué cuidados hay que tener una vez puesto? ¿Se puede hacer
vida normal?
La recuperación es inmediata. Tan solo pueden aparecer
pequeños hematomas y es recomendable no realizar ejercicio físico en dos o tres
días.
*¿Se pueden hacer otros tratamientos en los días posteriores? Limpiezas de cutis, masajes faciales, radiofrecuencia…
Pueden realizarse todo tipo de tratamientos como limpieza,
peelings,… excepto radiofrecuencia. El bótox es totalmente compatible con el ácido hialurónico, por ejemplo. Son dos tratamientos que tienen como objetivo
reducir los signos de envejecimiento y pueden complementarse perfectamente.
*¿Cuándo se puede hacer radiofrecuencia después de poner bótox?
Si te realizas radiofrecuencia debes esperar una semana a
realizarte bótox ya que la radiofrecuencia produce una inflamación de la
dermis. Si te realizas bótox debes espera un mes aproximadamente a realizarte
un tratamiento de radiofrecuencia, ya que hay que ver el resultado del bótox en cada
paciente y así actuar como es debido con la radiofrecuencia. De todas maneras
es orientativo. Lo ideal es consultarlo con el médico especialista.
*¿Cuánto dura el bótox? ¿Se va? ¿Por qué?
Es un tratamiento sencillo, con resultados que empiezan a
hacerse visibles a los dos o tres días, y tienen una duración de hasta 6 meses.
Una vez desaparece el efecto puede volver a infiltrarse el producto.
*¿Cuánto cuesta?
Un vial 360 € en Clínica Opción Médica.
Algo que me encanta de las redes sociales es descubrir nuevos lugares para ir a comer, en diferentes ciudades, y, sobre todo, en la mía propia. Aquí os dejo algunos de mis restaurantes favoritos en Barcelona. Gracias al #CosmetikTrip13, pude incorporar a la lista cuatro restaurantes más, esta vez en Madrid, que os quiero recomendar porque me encantaron. Os cuento por qué.
5 razones para contratar a un wedding planner. BodaMás de El Corte Inglés
By Sonia Marnez - 3:25
Cuando recuerdo los meses en los que mi marido y yo preparábamos nuestra boda ideal, se me acaba dibujando una sonrisa en el rostro. Fueron días de emociones, de búsquedas, de risas... aunque también hubo algún momento de tensión y de no saber dónde buscar. Pocos, pero los hubo.
Tengo amigas, y siempre lo cuento, que por poco no se casan.
Los preparativos no acabaron con ellas (y con la boda) de milagro. Incluso
recuerdo que algunas, así con sinceridad, se volvieron bordes e intratables en
ese tiempo pre boda.
Esta situación a mí me producía muchísima pena. ¿Es
necesario? En los tiempos que vivimos, ¿hay necesidad de que alguien prepare uno
de los días más bonitos y especiales de su vida entre gritos, discusiones,
lloros, enfados y agobios? Ya os digo que no. Hoy en día existen profesionales
que pueden ayudarnos a tener nuestra boda perfecta y, además, ocuparse de todos
los aspectos más pesados y crispantes que conlleva diseñar y organizar un
evento de esta envergadura. Por este motivo, os recomiendo contratar a un
wedding planner para la boda y os doy 5 razones:
Esta mañana, leía en un digital, con mucha pena, que a la actriz Selena Gómez (es una niña) la habían machacado a críticas en su cuenta de Instagram por unas imágenes suyas en bikini, paseando en un barco, mientras está de vacaciones en Sydney (Australia). No es la primera vez. Ya le había pasado durante otras vacaciones en México, en la que publicó en su Instagram una foto en bañador, en una tumbona, y le llovieron lindezas como: 'está gorda', 'es un desastre', 'se enloqueció'. De verdad que me quedo perpleja.
En esta última foto, os la voy a describir, se ve a una chica feliz y relajada, pasándoselo bien, con un bikini pequeñito, porque en muchos países, afortunadamente, las mujeres no tenemos que ponernos un burka para tomar el sol; con su cuerpo sano, no con tripita, no; un cuerpo sano y con una enorme cicatriz en la pierna derecha, resultado de una cirugía de emergencia, tras sufrir una complicación en una operación de trasplante de riñón. Yo, si tuviera una cicatriz así, os aseguro que la luciría bien orgullosa. Las cicatrices son marcas de supervivencia. Su respuesta ha sido colgar en sus rrss un vídeo disfrutando de su vida con la frase: 'yo no tengo que demostrarle nada a nadie'. Y yo añadiría: 'y menos en esa chorrada'.
Recuerdo perfectamente aquel verano del 88, cuando en la televisión apareció un anuncio en el que un coche circulaba por una carretera con un perro en la parte de atrás. De repente, el coche se detenía y se abría la puerta; el perro bajaba, la puerta se cerraba y el coche arrancaba siguiendo su camino, mientras el perro se quedaba allí quieto observando cómo se alejaba. Y mientras, sobre pantalla, aparecía el eslogan 'Él nunca lo haría. No lo abandones'.
Se trataba de una campaña de concienciación, desde la Fundación Affinity, contra el abandono de animales, sobre todo en las épocas vacacionales donde las estadísticas se disparan. Hoy, 30 años después, más de 100.000 perros son abandonados cada año en España. Los gatos tampoco se libran, con cerca de 40.000 abandonos cada año.
Mi perrita Kira tiene 8 años. Desde los 3 meses está conmigo. Es una Schnauzer mini sal y pimienta. Era mi primera vez. Mis abuelos habían tenido toda la vida perros en el pueblito. Recuerdo siempre las regañinas de mi madre porque me pasaba los días metida en la caseta con ellos y acababa siempre llena de pulgas. Pero vivir 24/365 con un animal, era nuevo para mí.